Dededulce: Tarta "Damas danesas"

¿Damas danesas?, ¿qué tarta es esa?... Supongo que será lo primero que habéis pensado al leer el título de este post. Pues sí, "Damas danesas". ¿Es original? No lo sé, pero yo nunca había oído hablar de esa tarta, y su elaboración ha sido producto de dejarme llevar. ¿es cursi el nombre? Quizás. Pero sea lo que sea, me siento muy orgullosa de mi tarta. Además su nombre tiene una buena explicación. Seguid leyendo esta entrada y lo descubriréis por vosotros mismos.

¿Damas danesas?, la verdad es que si la miras mucho parece más la tarta de la Pantera rosa, pero me está gustando su nombre "Damas danesas". Seguro que por lo menos os parece gracioso cuando sepáis de dónde viene su nombre.

Lleva lloviendo desde el martes por la noche, y ayer por la tarde hacía un día de frío horroroso, así que qué mejor para entrar en calor que encender un poquito el horno. Y como dentro de poco nos despedimos de esta ciudad, queríamos preparar algo especial para la gente que hemos conocido aquí, y como estamos en Dinamarca qué mejor que utilizar los colores de su bandera en la tarta. ¿La bandera de Dinamarca es rosa?No, ya sé que no. Pero no tenía rojo a mano, así que he utilizado lo más parecido, y sí, es el rosa. ¡Lo siento bandera pero te has desteñido un poco!

¿Y por qué lo de damas? Muy sencillo, porque el bizcocho al abrirlo es como un tablero de damas, a cuadrados de dos colores rosa (que tenía que ser rojo), y blanco. Mi idea era que tuviera más cuadraditos, pero como el diámetro del bizcocho no era muy grande y aquí no tengo utensilios suficientes, no me he querido arriesgar para que no se rompa.

Al cortarla con el buttercream que lo cubre no se dejan ver bien los cuadrados,
pero os dejo una muestra para que os hagáis a la idea.

Así que "Damas" porque en su interior es un tablero de ajedrez, y "danesas" porque está hecho con los "colores", la intención es lo que cuenta, de la bandera de Dinamarca.¿Os gusta?

Ahora sí comienzo a daros la receta paso a paso para que os animéis a elaborarla en casa. Lo primero es elegir dos sabores que puedan combinar bien para los bizcochos: chocolate y café, vainilla y chocolate, dulce de leche y chocolate, vainilla y caramelo... hay mil opciones. En este caso yo he elegido fresa y vainilla.

Para comenzar tenemos que hacer dos bizcochos. Los ingredientes para cada bizcocho son:

100 gr. mantequilla temperatura ambiente.
100 gr. de azúcar glass.
100 gr. de harina.
2 huevos temperatura ambiente.
1 cucharada de leche.
1 cucharada de levadura.
1 cucharada de esencia: fresa/Vainilla.
Para el de fresa: Un poco de colorante en gel rosa.
1 molde de 10 cm. de diámetro untado con mantequilla.

Preparación:

Batimos durante 3 o 4 minutos a velocidad media el azúcar glass con la mantequilla a temperatura ambiente hasta que obtengamos una masa cremosa. Sin dejar de batir vamos incorporando los dos huevos, y la esencia que corresponda a cada bizcocho.

La masa con colorante rosa para el bizcocho de fresa.

Azúcar glass, con la mantequilla y los huevos.

Ahora tamizamos la harina junto con la levadura. Yo como no tengo una balanza de cocina, ni ningún vaso medidor aquí, he encontrado una página que me ha resultado bastante eficaz para calcular los pesos y la cantidad que debía añadir en cucharadas. Os dejo el enlace por si os resulta útil: "Utilisima".

Vertemos cada contenido en un molde, e introducimos en el horno previamente precalentado a 180º durante 30-35 minutos. A mi me gusta ponerlo en las rejillas y a 1/3 de la parte baja del horno. Siempre vamos vigilando cómo va el bizcocho, y antes de sacarlo lo pinchamos para comprobar que está bien hecho.

¿Qué hacer para conseguir que al partir el bizcocho parezca un tablero de damas?

Es necesario tener cortadores redondos de diferentes tamaños, o en su defecto utensilios de cocina que puedan ayudarnos a sacar formas circulares. Yo por ejemplo, que con un molde tan pequeño sólo he realizado un círculo, me he ayudado de un vaso para descorazonar el bizcocho.

Al bizcocho de vainilla le he sacado del centro un mini bizcocho redondo con ayuda del vaso, y al de fresa el suyo. No os preocupéis porque no hace vacío, el bizcocho es poroso.

Un dato importante ahora es no equivocarse al intercambiar los corazones de los bizcochos. Al de fresa le ponemos el de vainilla y al de vainilla el de fresa. Si deseo obtener más cuadraditos en el corte, tendría que sacar un tercer círculo del que ya había sacado. Yo no he podido porque era muy pequeño, y no tenía con qué sacarlo, pero queda más bonito.

Ahora untamos una base entre medias de los dos bizcochos y los apilamos uno encima del otro. Yo la crema se la hice de frambuesas. Realmente lo hice para aprovecharlo también como buttercream para cubrirla, pero me quedó muy líquida. así que lo que me sobró ya lo aprovecharé para algo más. Eran frambuesas trituradas hechas zumo, con 60 gr. de mantequilla y 60 gr. de azúcar glass. Pero de saberlo hubiera untado directamente el segundo buttercream que mi super pinche me ayudó a hacer.

Y ya si que sólo nos queda preparar el buttercream de vainilla para cubrirla y decorarla. Y no es por nada pero esta vez si que lo he conseguido, gracias a mi ayudante, un buttercream delicioso, con una textura cremosa y consistente para trabajarlo. ¡¡¡Bieeeeeeeeeeeeeeeeen!!! Juzgadlo vosotros mismos:

Buttercream de vainilla y frambuesa:
250 gr. de mantequilla a temperatura ambiente.
250 gr. de azúcar glass.
3 cucharadas de la mezcla líquida anterior de frambuesa.
una cucharadita de esencia de vainilla.
Colorante rosa.
Luego más tarde colorante morado para las flores.

Lo primero es tamizar en un bol grande el azúcar, que como antes expliqué aquí no tengo para medir con jarra ni báscula así que lo hice con 30 cucharadas. Después añadimos la mantequilla y se batió durante 5 o 6 minutos a velocidad media mezclando bien.

Integramos las tres cucharaditas de la mezcla de frambuesa y la esencia de vainilla. Y por último la punta de un cuchillo de colorante rosa. Una vez preparado, con una lengua de silicona cubrí toda la superficie del bizcocho, que era la idea original. cubrir y poner unas frambuesas por encima.

Pero sobró bastante buttercream, así que lo oscurecí un poquito con morado y practiqué a decorarlo con flores. Lo acababa de ver en una tarta que ha hecho Maria Lunarillos de chocolate y caramelo y me encantó, así que saqué la manga pastelera y a practicar... Sé que las comparaciones son odiosas y la mía quedó bastante más cutre en comparación, pero yo me siento muy orgullosa de la mía también. Además siempre hay que aprender de las mejores, y siempre habrá más cosas que aprender.

Para decorar con flores puse la boquilla de estrella, rellene la manga pastelera y comencé a hacer pequeñas flores en la superficie de la tarta. Por si acaso el buttercream no me daba para todo, como pasó, por lo menos que la superficie estuviera cubierta. Las flores las hice desde el centro hacia afuera, antes las hacía al revés, y así quedan bastante más bonitas.

Y por último un pequeño toque para hacer aún más especial a las "damas danesas", entre las flores le coloqué pequeñas frambuesas enteras que le dieron el toque de rojo que faltaba. Espero que os guste.